A veces las heridas se cierran mientras un fragmento aun sigue dentro. Incluso cuando esas heridas parecen haber sanado continúan doliendo durante toda la eternidad.
Porque curar no es lo mismo que eliminar el dolor.
Solo puedes recordar el sabor de tus lagrimas derramadas una a una hasta secar por completo tus ojos.
Con el tiempo tu corazón se endurece no dejando que la sangre fluya por el resto de tu cuerpo de forma natural, el dolor se vuelve un simple picor y la oscuridad que lo envuelve es densa, no dejándote ver mas haya de ti mismo. Incapaz de vivir. Sin posibilidad de morir.
Lamentas haber nacido.
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