Madotsuki.

La puerta ya no es un vía de escape, mas bien los barrotes que te atan a este lugar predeterminado. Sietes que te ahogas ahí dentro, en tu habitación. No sabes nada del mundo exterior, ya que esa ventana solo te muestra la señal de ajustes. Tu único entretenimientos en esas cuatro paredes es tan repetitivo que se vuelve hasta otra tortura mas que añadir a tu larga lista. El cristal de los grandes ventanales simplemente te muestran la altura a la que te encuentras de la realidad. Sientes vértigo, pero allí es donde acabara todo.

Una vez en la cama, cierras los ojos, cuentas hasta tres y sueña. 

La primera apuesta en tu historia, abres la puerta y el verdor del habiente en lugar de tranquilizarte, te perturba, terminar por correr y en cada esquina hay un monstruo diferente. Que no te toquen o te perseguirán para siempre en tus recuerdos. No los escuches, solo intentan confundirte.

Continuas tu sueño, no habrá mas segundas veces. Aquí es todo tan cuadriculado que tus formas redondeadas solo pueden destacar negativamente... Intenta camuflarte pequeña niña. No te olvides tu gorro y tu bufanda o acabaras en el baño llorando.

Por mas que parpadees no veras nada, es la oscuridad lo que te acompaña, caminas y caminas sin rumbo fijo y aunque te choques con algo jamas podrás saber de que se trata. Tu cabeza se convierte en un farol con el único objetivo de librarte de esa oscuridad que te rodea, nadie mas podría ayudarte mas que tu.

La soledad te acompañara en todo tu camino, aunque te encuentres con un montón de gente nada cambiara. Solo tú seras capaz de cambiar el final.

Cuando finalmente llegues solo veras un páramo de hielo. No vas temblar por ese falso frió, después de todo solo es un sueño... Encerrada en ese iglu duerme la mas pequeña de tus vidas anteriores, en paz, imperturbable y a salvo... Sana y cuerda, la niñez no podría ser mas tranquila que los copos ya caídos en la tierra, cubriendo el suelo con un manto de recuerdos fríos en tu mente, calientes en tu corazón.

Dejando atrás la tierna infancia, volvemos a las forma geométricas, dibujos abstractos, aztecas... Te sientas apoyando la espalda en esas planas paredes pintadas con historias que jamas nadie ha vivido, sacas tu flauta y todas una melodía que nunca nadie había escuchado. Es la música lo único que te hace volar hacia él. Pues sera mejor que vayas rápido o otra podría ocupar las sabanas que una vez manchaste con tu vergüenza.

Paseate por las alfombras, que gritan pero no se quejan, pisotea las cabezas que una vez te pisotearon, porque no hay que mirar hacia abajo.. pero si lo hacer que sea para ver la cara de sufrimiento de los que en algún momento te hicieron sufrir a ti. Llora por ellos cuando hayas acabado, el remordimiento es el primer paso a la aceptación de tu estado.Avanza.

Tu siguiente nivel son los ojos que te juzgan. Sin parpadear ni una sola vez, te observan y de etiquetan... No eres nada mas que palabras en la boca de la gente.

El olor de las velas quemándose embriaga tus sentidos, la cera cae lenta pero imperiosamente, igual que avanza el tiempo, como tus pasos hacia tu siguiente delirio. Es la música de su piano, el sonido de las amigables risas o el tacto de una amable mano acariciando tu pelo lo que te hace seguir viviendo. Pero los sentimientos pueden cambiar igual que las estaciones.. la música puede ser ruido, las risas convertirse en guturales llenos de oído y rencor y la desfigurada mano que ahora te acaricia el cuello se aprieta cada vez mas a su alrededor.

Las luces de neón y la gente a tu al rededor es el único calor que puedes sentir en esta habitación, todo es de mentira, nada mas que mascaras, solo sonidos confusos, los colores luminosos y la danza de los objetos aparentemente inanimados terminan por marear tu cabeza y enviarte a un sueño aun mas profundo, donde la lluvia no te mojara y la sangre que chorrea de tu cuchillo jamas sera limpiada.

Aun no te despiertas de tu pesadilla pero ya fatal muy poco... Miles de números sin aparente significado forman paredes y suelos de esta sala, te desorientas, te pierdes y por mucho que intentes buscar la respuesta a ese problema que aun no te han planteado no hayas respuesta por ningún lado, aunque si te hubieras fijado mejor sabrías que lo tenias delante de tus narices desde el principio.

Tú salvación... 

Jugandote la vida al 50%

¿Le darás la espada a la puerta o a la ventana?
Sabes que es lo correcto pero... ¿Qué sera lo apropiado?

Fiasco.